Vol. 14 Núm. 1 (2007): GénEroos - Impresa
IMPRESA
El desarrollo de la civilización nos demuestra que la única constante es el cambio, y que muchas veces para trascender es necesario modificar estructuras del pensamiento, mirar desde otra perspectiva aquello que resultó en el pasado, mas ha sido rebasado por las circunstancias actuales, configuradas a su vez por las nuevas (otras) condiciones de producción, demarcadas en su orientación y trayectoria por recursos humanos, materiales e institucionales específicos.